Hay ciertos pasos que todos los propietarios de una vivienda deben seguir para ponerla en alquiler. Descubre qué gastos te supondrán y otros consejos.

Nuestros padres y abuelos nos cuentan que, cuando eran jóvenes, solo necesitaban ahorrar unos cuantos años para comprar una casa. Hoy, la mayoría de las personas no pueden permitírselo. El alto precio de las viviendas, unido a la inestabilidad del mercado laboral, hace que muchas personas se decanten por un contrato de alquiler.

Por lo tanto, los propietarios de un inmueble están de enhorabuena. Contar con la escritura de propiedad de una vivienda te ofrece la oportunidad de alquilarla y, por tanto, de conseguir unos ingresos fijos cada mes. Aunque no todo es jauja. Antes de lanzarse hay que tener en cuenta que poner una vivienda en alquiler implica ciertos gastos, como costes de reparaciones, seguros de hogar, pago de ciertos suministros e impuestos, entre otros.

Qué hacer para poner una vivienda en alquiler

Alquilar una casa no es tan fácil cómo poner el cartel de “Se alquila” en el balcón. Si se quiere sacar la mayor rentabilidad, los propietarios, deberían seguir ciertos pasos previos:

1. Para alquilar una vivienda debes acreditar que eres el dueño del inmueble a través de una escritura de propiedad, aunque también puede valer con una nota simple del Registro de la Propiedad.
2. A continuación, prepara la casa para el alquiler. Haz las mejoras que sean necesarias y da de alta los suministros, como el agua, la luz o el gas para que el inquilino pueda entrar a vivir en cualquier momento. Eso sí, después será el arrendatario el encargado de pagar los suministros mes a mes.
3. Para poner un precio al alquiler, haz una investigación del mercado. ¿Qué se está cobrando por el alquiler en tu zona y en vivienda parecidas a la tuya? Ahí tienes la respuesta. Si pones un precio más bajo que la media es probable que alquiles antes la casa, pero perderás rentabilidad. Y si lo pones más alto, es posible que tus potenciales inquilinos no lleguen ni siquiera a llamarte para concretar una visita.
4. Haz un anuncio atractivo para que llame la atención y que esté acompañado de buenas fotografías del inmueble y a ser posible un vídeo, para así diferenciarte de la competencia.
5. Entrevista a los interesados, preferiblemente en persona. Comprueba su solvencia para evitar futuros impagos y, sobre todo, antes de firmar el contrato de alquiler, fíate de tu intuición si no te transmiten buenas sensaciones.
6. Que quede todo claro. Asegúrate antes de firmar el contrato de alquiler que tu inquilino comprende sus derechos y obligaciones. Para ello, lo mejor es leerlo juntos y repasar todos los puntos que podrían generar conflictos.

Gastos de poner una vivienda en alquiler

A todos nos ha pasado alguna vez que nos metemos de cabeza en un negocio pensando que vamos a sacar un beneficio económico y no tenemos en cuenta los costes que conlleva poner el proyecto en marcha. Al final, los gastos se disparan y el beneficio que pensábamos sacar se reduce considerablemente.

Con el alquiler de viviendas pasa lo mismo. Hay que tener en cuenta que poner una casa en alquiler conlleva una inversión inicial y unos costes fijos mensuales que debemos contabilizar para no llevarnos un chasco. Estos son los principales gastos que vamos a tener que hacer frente:

• Reformas de la casa: qué menos que dar una capa de pintura para adecentar la vivienda y no espantar a los posibles inquilinos.
• Fotografías o vídeo profesional: si quieres que tu anuncio llame la atención, conviene que encargues las fotografías de la vivienda a un profesional. Si además haces un vídeo resaltando todas las ventajas del inmueble, podrás aumentar las posibilidades de alquilar una vivienda en un tiempo menor y a un mayor precio.
• Certificado energético: debes entregar una copia al inquilino y renovarlo cada diez años.
• Antes de que el inquilino entre a vivir a la casa, es conveniente que los propietarios tengan los seguros de hogar al dia. En el caso del alquiler, los seguros de hogar no son obligatorios, pero sí recomendables, ya que te ofrecen la tranquilidad de que tu casa está protegida, pase lo que pase.
• En cuanto a los impuestos, es obligatorio incluir en la Declaración de la Renta el dinero que estás recibiendo del alquiler, si bien puedes deducirte una serie de gastos y aplicar una reducción si la casa está alquilada como vivienda.

Otros consejos para alquilar una vivienda

¿Tienes prisa por alquilar tu casa, pero a la vez quieres encontrar al inquilino perfecto? Estos consejos pueden ayudarte:

• Si vives en una gran ciudad, la mejor época para alquilar un piso es a finales de verano, porque es cuando muchos inquilinos, como los estudiantes, buscan vivienda ante el inminente comienzo del curso escolar.
• Si te agobia todo el tema del alquiler, déjalo en manos de profesionales. Te despreocuparás de todo lo concerniente a este asunto, lo que es un alivio especialmente si no dispones de experiencia.
• Exige seguridad. Pide al inquilino garantías de pago, como la nómina. Solicitar algún mes por adelantado y fianza supone mayor tranquilidad para el arrendador.
• Busca tu target. Si quieres alquilar tu casa por un breve espacio de tiempo, quizá te interese un estudiante. Si buscas un alquiler a largo plazo, una familia con hijos resultaría ideal.
• Ten en cuenta que tener cierta flexibilidad y llegar a acuerdos con tu futuro inquilino permite agilizar todos los procesos.

Como habrás visto, para poner una vivienda en alquiler hay que tener en cuenta algunos pasos previos y determinados gastos. ¿Te ha quedado alguna duda? ¡No te preocupes! Seguro que te podemos echar una mano. Contacta con nosotros y lo vemos en profundidad. ¡Estamos para ayudarte!