Estamos acostumbrados a abrirnos paso en un entorno laboral de gran competitividad que nos empuja constantemente a ampliar nuestro conocimiento: aprender nuevos idiomas, especializarnos en nuestra profesión, mantenernos al día con la última tecnología y dominar un sinfín de herramientas. Sin embargo, en este enfoque hacia lo académico, a menudo pasamos por alto el valor de las soft skills, igualmente importantes a la hora de potenciar la productividad laboral.

Estas habilidades van más allá de lo puramente técnico y no se adquieren en las aulas universitarias. Estamos hablando de la empatía, la capacidad de trabajar en equipo o la resolución de problemas, entre otras. Son competencias que pueden marcar la diferencia en nuestro desempeño profesional y en nuestras relaciones interpersonales.

Es hora de reconocer la importancia de estas destrezas y comenzar a cultivarlas desde este mismo momento. ¿Nos acompañas a descubrir cómo pueden transformar tu carrera y tu vida?

El poder de la inteligencia emocional

“La inteligencia académica no ofrece la menor preparación para la multitud de dificultades –o de oportunidades– a las que deberemos enfrentarnos a lo largo de nuestra vida”. Esta frase resume uno de los best sellers de los años noventa: “Inteligencia emocional” de Daniel Goleman.

Su autor es un psicólogo y escritor estadounidense conocido por poner sobre la mesa por primera vez la importancia de las habilidades blandas. A menudo, las personas que tienen más éxito en la vida o se posicionan mejor en el ambiente laboral no son siempre las que más títulos acumulan.

Las habilidades sociales pueden llegar a definir nuestro futuro más de lo que imaginamos. Por ello, el libro de Daniel Goleman resurge con fuerza en la actualidad. Es imprescindible inculcar a las nuevas generaciones la importancia de cultivar estas pericias sociales y comenzar a aplicarlas desde temprana edad, incluso en el entorno escolar.

Consejos para mejorar nuestras soft skills

Aunque no se puedan adquirir en un centro universitario como un título de máster, existen formas de aprenderlas y desarrollarlas. Aquí te presentamos algunas de las más relevantes, para que a partir de ahora puedas destacar entre tus amigos o mejorar el ambiente laboral. ¡Quién sabe, quizás esto marque el cambio de vida que estabas esperando!

• Comunicación asertiva. Escuchar atentamente a los demás, mostrando interés por lo que dicen y formulando las preguntas pertinentes, es una destreza poco común en la actualidad. A esto se suma la capacidad de expresar tus ideas y pensamientos con claridad. ¿Te animarías a participar en debates o cursos de comunicación para practicar?
• Cultiva la empatía. A pesar del estrés diario y las preocupaciones, es importante evitar sumergirnos exclusivamente en nuestros propios problemas. Para establecer conexiones reales con los demás, debemos esforzarnos por ponernos en su lugar y comprender sus perspectivas y experiencias.
• Gestión del estrés. Esta cualidad es fundamental en la era actual, dominada por la abrumadora presencia de la tecnología. Si bien alcanzar la serenidad absoluta puede resultar difícil, es un objetivo que vale la pena perseguir, especialmente en el entorno laboral, ya que no solo contribuye a nuestra salud mental, sino que también impulsa nuestro desarrollo profesional.
• Practica la resiliencia. Uno de los mayores aprendizajes de la edad adulta es reconocer que el mundo no es perfecto. Responsabilidades, trabajo, crisis de pareja, enfermedades... Ahí es donde entra en juego la capacidad de mantener una actitud positiva y adaptarse ante los desafíos, buscando oportunidades de crecimiento.
• Confía en ti mismo. Puede sonar a típico consejo de autoayuda, pero creer en tus capacidades y fortalezas es primordial. Esto te permitirá establecer metas claras y trabajar hacia ellas con confianza y determinación.

Comunicación efectiva en el trabajo

¿Alguna vez te has preguntado por qué algunas personas destacan más que otras en la oficina? ¿Por qué todos recuerdan sus nombres, felicitan sus cumpleaños y buscan tenerlas como compañeras en los proyectos en equipo?

Es innegable que, en el ámbito laboral, las soft skills impactan con más fuerza. Pasamos una gran parte de nuestro tiempo colaborando con otros bajo presión, por lo que rodearse de colegas positivos, resolutivos y empáticos se vuelve indispensable.

Por otro lado, todos conocemos al típico compañero que está de mal humor, que no colabora con los demás o que busca cualquier oportunidad para señalar los errores de los demás ante el jefe. En situaciones así, ¿a quién preferirías tener cerca?

Por eso, los departamentos de recursos humanos ya no se fijan solo en las titulaciones, sino en la impresión que les ofrecen las personas. Por lo que, si eres alguien sonriente, seguro y agradable con los demás, tendrás varios puntos a tu favor.

Las habilidades que más buscan las empresas

Llegados a este punto, te estarás preguntando cuáles son las habilidades sociales que más te ayudarán a destacar entre la multitud de candidatos que postulan a un mismo puesto ¡Pues sigue leyendo!

Según el Informe de “Empleos en auge” de LinkedIn para el año 2024, el 57 % de los directivos afirman que las habilidades blandas son más valiosas que las técnicas. ¡Así que comienza a enfocarte en desarrollar las habilidades emocionales! ¿Y cuáles son las que más buscan?

En primer lugar, el estudio señala que las empresas cada vez se fijan más en personas que sepan enfrentar desafíos constantes y adaptarse a los cambios. Por ello, la resolución de problemas y la flexibilidad son esenciales en los entornos laborales dinámicos actuales.

Si hablamos de emprendimientos lo que más se demanda es la productividad en el trabajo y el impulso a la empresa mediante destrezas como la gestión del tiempo, la creatividad y la innovación. ¡Así que, si tienes una idea nueva, no te la guardes!

Por último, pero no menos importante, están las habilidades emocionales. Los gerentes quieren personas más empáticas, colaborativas y que promuevan un buen clima laboral. Además, se valoran la capacidad de aprendizaje continuo y la resiliencia.

Mejora tu ambiente laboral

Lograr un equipo donde todos se lleven bien, tengan confianza e incluso queden después del trabajo es el sueño de todas las empresas. Para ello, además de escoger bien a las personas, es importante optimizar la comunicación en el trabajo.

Esto no solo mejora la vida de los empleados e impulsa su desarrollo profesional, sino que también tiene múltiples beneficios para las empresas:

• Productividad en el trabajo. Dominar habilidades como la organización y gestión del tiempo puede aumentar la eficiencia laboral. Quien tenga estas habilidades podrá priorizar tareas y completar proyectos más rápidamente. ¿Qué tal si pruebas a ser tú?
• Reducción de conflictos. Crear espacios de diálogo donde se expresen las diferencias de forma respetuosa puede evitar malentendidos entre los compañeros o con los superiores. Al fin y al cabo, ¿quién quiere trabajar en un entorno lleno de tensiones?
• Mayor innovación. Promover la creatividad y el brainstorming puede ser especialmente útil para empresas nuevas. Por ejemplo, los empleados de Google dedican un día a la semana a idear nuevos proyectos. No suena mal, ¿verdad?
• Fortalecimiento del liderazgo. Siempre es necesario un líder que guíe al grupo y asuma más responsabilidades. Esto incluye gerentes que sean capaces de inspirar y aumentar la moral de sus empleados en tiempos de vacas flacas.
• Mejora del clima laboral. El objetivo final de implementar estas herramientas es crear un espacio positivo donde den ganas de ir a trabajar cada mañana. Mantener a los empleados satisfechos es la mejor forma de impulsar su desarrollo profesional y retener talento.

No lo pienses más y comienza cuanto antes a formarte y aprender sobre todas estas habilidades blandas. Puedes lograrlo a través de cursos de oratoria, practicando el autoconocimiento, mostrando interés por la vida de tus compañeros o mejorando el manejo del estrés. Para facilitarte este último aspecto y permitirte concentrarte en lo verdaderamente importante, nos gustaría presentarte nuestro seguro de incapacidad laboral temporal. Protege tu nivel de vida en caso de baja laboral debido a un accidente o una enfermedad, garantizando una indemnización fija según la naturaleza de la patología, tal como se establece en nuestra tabla de valoración, sin importar la duración de la baja.