• Lourdes Peña | #impúlsate
  • 4 min de lectura

Según diferentes estudios sociológicos que se han realizado sobre la población española, el 42% de los españoles se plantea nuevos objetivos o propósitos de cara al nuevo año. Es más, en base a los datos publicados en el año 2023, el 50% de ese grupo de personas, se establece objetivos relacionados con la actividad física y/o deporte. ¿Estás entre estas personas?

¿Dónde está el problema? Fácil: solo 2 de cada 10 personas reconocen haber cumplido con estos propósitos al acabar el año. Una cifra bastante baja. Está claro que hay algún problema, ya sea en la elección de los objetivos o en la voluntad para cumplirlos.

establecer objetivos

¿Cómo establecer objetivos reales?

Saber ponerse objetivos es lo primero. Tenemos un ideal de lo que queremos pero la vida, el día a día, nuestro ritmo, nuestra capacidad y nuestra voluntad deben jugar un papel importante para decidir qué podremos asumir y qué es simplemente una proyección de nuestros deseos.

Una buena manera de comenzar sería:

  1. Empieza por un solo propósito. No intentes cumplir muchos objetivos a la vez (sobre todo, si tienen relación entre ellos). Si quieres comenzar nuevos deportes en 2024, ¡no intentes comenzar con todos en el mismo mes! Ir poco a poco y separar los retos y objetivos en partes más pequeñas acostumbra a ser un buen camino para conseguir llevarlos a cabo.
  2. Marca objetivos específicos. Es decir, para ponerte un ejemplo, tu objetivo debe ser “realizar 3 sesiones de entrenamiento a la semana”. Olvida la frase “realizar más ejercicio”. Esto te ayudará a crear marcas que te motiven a cumplir. A veces, esas frases genéricas son estrategias inconscientes que nos ponemos a través del lenguaje para auto-engañarnos, en cierto modo, y no comprometernos con nada concreto. Seamos claros con nosotros mismos.
  3. Elige metas alcanzables. Muchas veces, el problema radica en que nuestros objetivos tienen dimensiones demasiado altas que nos generan frustración y finalmente llevan al abandono. No busques comenzar con muchas sesiones de entrenamiento o con mejoras en el rendimiento demasiado exageradas. Busca siempre progresar poco a poco, cuando cumplas tu meta establecida, estarás motivado para continuar a por más. En el deporte, el ir paso a paso, partido a partido, es siempre una buena filosofía. Aunque ser ambicioso también puede ser una fuente de motivación, no nos lo pongamos difícil. El reto es cumplir, no hacerlo lo más rápido posible. Además, ir cumpliendo metas nos va dando recompensas y eso nos anima a seguir por el buen camino.

  4. Busca la flexibilidad. Establecer objetivos que no permitan el cambio o adaptaciones puede impedirte cumplirlos. Es habitual que cuando empezamos a fallar de forma reiterada, acabemos dándonos por vencidos. Una vez más, no nos lo pongamos más difícil de lo que es: tengamos cintura para ver cuando podemos dar más y cuando debemos parar, ceder o saber adaptarnos a nuevas circunstancias. Por ejemplo, no pasa nada si durante unos días la familia o el trabajo le quitan algo de espacio a la actividad física. Seamos conscientes de ello y readaptemos para recuperar en otro momento, sin forzarnos en exceso y arriesgar a caer en el desánimo por no cumplir lo marcado en un principio.

¿Cómo elijo mi nuevo reto del 2024?

Recuerda que cualquier meta que te plantees debe ser adaptada específicamente a ti. Debes tener en cuenta tus limitaciones y, por supuesto, tus cualidades.

En cuanto a deporte se refiere, los objetivos más fáciles de cumplir pueden ser:

  1. Mejorar el rendimiento de una disciplina deportiva. Por supuesto, debe ser una que ya estés realizando desde hace algún tiempo. Establece un objetivo, sobre todo que sea medible, de forma que puedas valorar el progreso.
  2. Participar en un evento o competición deportiva. No es necesario que sea a nivel profesional, pero te servirá de motivación tanto para tu entrenamiento previo como para tus metas de superación posteriores. Puede ser una carrera de tu localidad (o de otra y así aprovechas para viajar y hacer turismo), un torneo de algún deporte… Seguro que en internet encuentras mil opciones adaptadas a lo que buscas y que te motivarán.
  3. Elige un nuevo deporte. Como te decíamos antes, elige solo uno diferente, o uno diferente en cada época del año. Por ejemplo, aprende a esquiar en invierno y a surfear en verano. Recuerda elegir deportes que después puedas seguir realizando.
  4. Establece récords personales. Superarse es una de las mejores motivaciones para realizar ejercicio. Intenta establecer marcas que puedas superar cada mes, o cada X número de entrenamientos. Eso te estimulará y te empujará a progresar… ¡verás que no hay mejor rival que tú misma/o!
  5. Entrena con un entrenador personal. Tener un entrenador personal que adecúe el entrenamiento de forma individual te ayudará a mejorar más rápido y a conseguir más logros. Si no encuentras tu deporte o la energía para comenzar, esta puede ser una muy buena opción. Ponerse en manos de profesionales siempre es una buena opción para avanzar en el ámbito que sea.

Ahora bien, todos los objetivos que te marques deben tener como finalidad mejorar tu salud y calidad de vida, aumentar tu rendimiento y proporcionar un estado de bienestar tanto físico como emocional. Grandes metas inalcanzables o demasiado atrevidas pueden generar frustración, ansiedad y por supuesto apatía o aburrimiento por mantener la actividad.

Empieza tu lista y ¡a por ello!

Si te quedan dudas, el equipo de expertas y expertos entrenadores de MAMIFit y los médicos de nuestros seguros de salud te ayudarán a encontrar el objetivo a tu medida para que puedas empezar el 2024 con energía, salud y motivación.

Más sobre mí
Lourdes Peña Romero. Fisioterapeuta y entrenadora de MAMIfit. Especialista en suelo pélvico. Máster en acondicionamiento físico y control motor. Doctorada en la Universidad de Castilla-La Mancha.

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