- Lourdes Peña | #impúlsate
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La salud mental, una ventaja más de realizar ejercicio físico
Son numerosos los estudios que, actualmente, están relacionando el ejercicio físico con el beneficio en la salud psicológica, mejorando entre otras cosas la autoestima y el estado de ánimo.
En una época donde las aficiones tecnológicas que nos mantienen atados al sofá o a la silla vienen pisando fuerte, la actividad física nos demuestra, una vez más, que son múltiples los beneficios que se obtienen de ella. Promueve una mejora de la salud mental, y va mucho más allá, ya que previene la aparición de enfermedades psicológicas como la ansiedad o la depresión.
Pero ¡ojo! Existen variaciones en esta mejora del estado emocional en función del deporte, intensidad y/o duración de la práctica deportiva.
¿Cómo afecta el deporte a nuestro nivel emocional?
Aquí tenemos la clave. Todavía faltan investigaciones para establecer un consenso de qué es lo que ocurre en nuestro sistema. De momento, ahí van las dos teorías que se barajan:
- Por un lado, se cree que nuestro estado de ánimo puede estar regulado por el aumento en la segregación de monoaminas (algunas tan famosas como la dopamina). Estas monoaminas tienen un efecto antidepresivo igual que si nos tomáramos un medicamento.
- Por otro lado, la segunda hipótesis que se plantea es el aumento en los niveles de serotonina (una de las sustancias opioides de nuestro cuerpo, esa “morfina” natural). ¿Qué hace la serotonina? Tras el ejercicio, actúa en el sistema nervioso central aumentando los niveles de bienestar e incluso se estudia la posibilidad de que disminuya la irritabilidad, estrés, nervios y ansiedad.
¿Todavía estás dudando si empezar a hacer deporte? Si ya estás convencido debes conocer aún algo más.
Distintas prácticas deportivas, distintos efectos en el organismo
Una vez más, nos apuntamos al consejo deporte sí, pero con moderación. Sí, eso es, nada de sobrecargarse de horas y horas de entrenamiento u obsesionarse con el resultado físico llegando a generar situaciones de malestar al no realizarlo, o generando en nosotros mismos alteraciones de la percepción física.
¿Cómo hay que conseguir el beneficio? Fácilmente. Demostrado en distintos estudios, la actividad física empieza a ejercer sus efectos cuando llevamos varios días realizándola, dejando tiempos de recuperación cada semana. Tanto es así que cuando asociamos el deporte de alta intensidad a períodos de más de 10 días de duración, el bienestar personal decrece considerablemente. Para resumir, una buena fórmula es:
Ejercicio físico moderado + 4-5 días de mantenimiento = mejora del estado anímico
Dicho todo esto, ya no te quedan excusas para coger toda esta información y ponerla en práctica ¡YA! 😄
Si te quedan dudas, el equipo de expertas y expertos entrenadores de MAMIFit y los médicos de los seguros de salud de Tomamos impulso te ayudarán a empezar una actividad adaptada a ti o a establecer estrategias te servirán para adoptar unos buenos hábitos que te ayudarán a mejorar tu salud y calidad de vida ahora y siempre.
Más sobre mí
Lourdes Peña Romero. Fisioterapeuta y entrenadora de MAMIfit. Especialista en suelo pélvico. Máster en acondicionamiento físico y control motor. Doctorada en la Universidad de Castilla-La Mancha.
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