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Repasamos las claves para proteger a las mascotas del calor. Todo lo que debes saber para evitar posibles insolaciones y deshidrataciones.
Sí, has visto bien el termómetro de la plaza de tu pueblo. Las temperaturas no paran de subir. Todo apunta a que este verano será aún más tórrido y duro de lo normal. Toca intentar pasar todo el tiempo posible a la fresquita y prestar mucha atención al cuidado de tus mascotas.
¿Sabías que el verano es una de las épocas más peligrosas para muchos de nuestros inseparables amigos? Ellos, por sí solos; no pueden acceder a agua fría ni encender el ventilador cuando el ambiente alcanza la temperatura perfecta para freír un huevo. Mucha atención a las necesidades de los animales en verano. Aquí te dejamos algunos consejos para que disfruten casi tanto como tú.
Agua, mucha agua para evitar la deshidratación de nuestras mascotas
En verano nuestro cuerpo demanda un mayor consumo de líquidos, y eso mismo les pasa a los gatos, perros, conejos, cobayas... Ya imaginamos que siempre estás pendiente de que tenga agua suficiente en el bebedero, pero intenta que esta sea limpia y fresca.
Si vas a pasar tiempo fuera de casa, asegúrate de que el recipiente está en un lugar con sombra. Contar con un bebedero automático, un bebedero refrescante (de esos que se meten previamente en el congelador) o, incluso, añadir algo de hielo, pueden ser posibles soluciones para prevenir la deshidratación de las mascotas.
No olvides llevar una botella de agua (las hay adaptadas para animales) si sales de paseo, excursión o viaje. Cuanto más se muevan, más agua necesitarán. Ofrece, aunque sea un chupito, de forma constante.
Paseos, siempre a la fresca
No todas las mascotas salen de paseo, pero aquellas que lo hagan —principalmente los perros— deben evitar las horas más candentes del día. Por la mañana temprano o a última hora, las temperaturas suelen ser algo más agradables. Y ten en cuenta que igual también tienes que acortar algo el recorrido habitual.
Precaución también con los gatos que se escabullen a darse un garbeo. Conviene mantener los accesos al exterior cerrados durante las horas centrales. Y no te olvides de tener esto en cuenta con cualquier otro compañero peludo o con plumas que acostumbre a tomar el aire en jardines, terrazas o patios. Toda previsión es poca para proteger a las mascotas del calor, pero con conocer las necesidades de nuestros animales en verano y aplicar un poco de sentido común puede ser más que suficiente.
TCuidar la alimentación, otro must del verano
Con el calor, la comida se echa a perder rápidamente, por lo que habrá que cambiarla con mayor regularidad. Además, el desbarajuste en las rutinas y los emplazamientos también nos puede jugar alguna mala pasada.
Revisa las cantidades, el horario y el menú. Hay que adaptarse a las necesidades de los animales en verano. Han de prevalecer las comidas hidratantes, otorgando un mayor peso a la comida húmeda. Cuando pienses en darles algún capricho, procura que sea beneficioso para ellos. Fruta en dados o helados especialmente hechos para mascotas, pueden ser fantásticas alternativas.
Dejarlos en el coche puede resultar una trampa mortal
Por mucho que dejes las ventanillas un poco abiertas, por mucho que sea solo un momento, dejar una mascota en un coche sin vigilancia durante los meses de verano puede acabar con su vida. En un cortísimo espacio de tiempo, los vehículos se calientan pudiendo alcanzar más de 45º.
Pero esta no es la única precaución para el cuidado de las mascotas cuando se trata de coches. Cuando estén en movimiento, no debemos olvidar que deben viajar a bordo de un transportín o con un cinturón o cualquier método permitido que evite su interferencia en la conducción.
Cómo ayudarles a regular su temperatura corporal
Los animales no son capaces de regular la temperatura corporal con la misma facilidad que los humanos. No le cortes el pelo. En el caso de los perros, se tiende a pensar que es algo beneficioso cuando en la mayoría de las razas no es así. El pelo actúa de barrera protectora. Lo que sí hay que hacer es cepillarlos bien para deshacerse del pelo muerto.
Si disfruta con el agua, puedes darle una ducha, un manguerazo o prepararle un barreño adaptado a su tamaño. Hay mascotas que no dudarán ante la posibilidad de un refrescante chapuzón en la piscina. Ojo, porque no todas saben nadar. Asegúrate de que entran y salen con facilidad.
Las mascotas también usan protección solar
Si nuestra mascota tiene el pelo corto, claro o zonas despigmentadas (blancas o rosadas), debemos protegerla con crema solar de factor alto, mínimo FPS +30.
En caso de no encontrar factor solar específico para mascotas, puedes emplear una crema solar para niños.
Las solares no son las únicas quemaduras que debemos evitar. Mucha precaución con la temperatura que el asfalto adquiere en verano. No debemos olvidar que nuestras mascotas no llevan zapatos. Antes de salir, pon el anverso de la mano en el suelo y cuenta hasta cinco, si quema, no deben caminar por ahí porque pueden dañarse las almohadillas de las patas.
Cómo detectar un golpe de calor en perros
Si a pesar de haber puesto en práctica todo lo que te hemos contado para el cuidado de tus mascotas, detectas algunos de estos síntomas, tu perro puede estar sufriendo un golpe de calor.
- Jadeo excesivo al respirar
- Reducción significativa de la actividad
- Saliva espesa y babeo
- Mareos o desorientación
- Vómitos
- Convulsiones y temblores musculares
- Colapso o pérdida del conocimiento
¿Qué debes hacer? Empápale las patas, fundamentalmente las almohadillas, y la tripa para enfriar su temperatura corporal, y si ves que no se repone, acude cuanto antes al veterinario para que reciba la atención necesaria. Con Mascotsegur podrás llevarlo a la clínica que desees tanto en España como en el extranjero. ¿Todavía no conoces todas las ventajas que te están esperando? Entra aquí para informarte.
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